Matrimonio Forzado - Capítulo 50

    

  


    Quiso darse la vuelta e irse inmediatamente para demostrarle a aquel omega que, de todos modos, nunca haría lo que él quería.

    Wei Zhiyan a un lado estaba muy tranquila, abrió el zapatero a un lado, sacó tres pares de zapatillas, luego se las puso ella misma. Sacudió la cabeza a Nian Weijun, diciéndole que se calmara, que no era el momento de enfadar a Xu Yiran, la empresa tenía un gran número de directores difíciles esperándole.

    Los tres se sentaron en el sofá del salón, como invitados normales, y Xu Yiran sacó una tetera y un plato de galletas pequeñas para servirles.

    Dijo significativamente: "Esto es té de frutas, es justo lo que hay que beber en verano para bajar el fuego".

    Nian Weijun detestaba a ese omega y no quería hablar con él en absoluto, y Wei Zhiyan parecía no estar en absoluto ansiosa, así que sólo el ayudante especial Liao estaba tan ansioso que tuvo que ser él quien hablara.

    "Sr. Xu, la red..."

    "¿Quiere una galleta?" Xu Yiran ya ni siquiera le escuchaba, sino que empujó el plato de pequeñas galletas delante de Nian Weijun, que debían de estar recién horneadas no hacía mucho, emitiendo un tentador aroma rico y cremoso.

    Wei Zhiyan, sin embargo, sonrió y le recordó: "Al señor Nian no le gusta comer esto".

    Xu Yiran, sin embargo, miró a los ojos del señor Nian Weijun, empujó suavemente el plato hacia delante y preguntó con voz suave: "¿Es así?".

    Nian Weijun le miró provocativamente: "Muy molesto, especialmente... de ti". Intensificó su tono con cada palabra.

    "¿Es así?" Xu Yiran retiró la mano, como si algo se estuviera gestando en sus ojos, sin esperar a que lo mirara de cerca antes de evitar sus ojos y sentarse derecho de nuevo, por alguna razón, Nian Weijun parecía ver que estaba un poco triste.

    "Cuando... por supuesto." Estas dos palabras parecían un poco a medio decir.

    Tranquilizó su mente: "No tengo tiempo para hablar contigo sobre galletas de té de frutas. ¿Saliste en las noticias de hoy?".

    "Lo hice", cogió su propia taza de té y bebió un sorbo, lo dejó con el ceño fruncido, demasiada miel y todavía estaba demasiado dulce.

    Al ver su mirada de "¿Qué puedes hacerme?", Nian Weijun se puso furioso. Estaba furioso, pero aún recordaba el propósito de su visita de hoy.

    "¿Qué es lo que quieres?, seamos claros". Como si estuviera negociando las condiciones con un rival, hizo un gesto a Liao Junmin para que sacara su grabadora y grabara.

    Xu Yiran miró la grabadora que había sobre la mesa y se limitó a hacer una mueca de desprecio, sin saber a quién estaba mirando, antes de decir: "Nada, lo único que quiero es una boda para que todo el mundo sepa de nuestra relación, y así todos los malos rumores desaparecerán de forma natural."

    Al segundo siguiente, Nian Weijun se negó con voz grave: "¡Ni siquiera lo pienses!".

    Xu Yiran se levantó, arrojó la grabadora que había sobre la mesa a la taza de té de frutas que había delante de Nian Weijun, y dijo condescendiente: "Entonces no hay nada de qué hablar, por cierto, hoy tengo varias citas con periodistas, el tiempo se acaba, así que si te parece bien, por favor, vete tú primero."

    Nian Weijun resistió el impulso de salpicarle la cara con té de frutas y se levantó también, enfrentándose a él cara a cara, y le dijo con los dientes apretados: "Muy bien, Xu Yiran, ¿hasta has contado contigo, sólo una boda? Te lo concedo, un matrimonio a cambio de beneficios, ¡puedes quedártelo si quieres! Me gustaría ver cuánto tiempo puedes conservarlo."

    "¡Presidente Nian!", Wei Zhiyan vio cómo los dos se enfrentaban, pero no estaba de buen humor. No quería que Nian Weijun volviera a tener contacto con él.

    "¡Vete!" Nian Weijun dio una patada al pie de Liao Junmin para apartarlo del camino, luego caminó hacia la puerta y se puso los zapatos, con la intención de marcharse.

    Liao Junmin se levantó apresuradamente para seguirle, sin olvidar saludar con la cabeza a Xu Yiran, Wei Zhiyan se levantó de mala gana, se encontró con los ojos de Xu Yiran e inexplicablemente se sobresaltó un poco, se dio la vuelta tímidamente y le siguió para marcharse.

    La puerta se cerró despiadadamente y la habitación volvió a quedar en silencio, las cuatro tazas de té de la mesa aún estaban calientes pero nadie quería tomar un sorbo excepto él, también había galletas... cogió una y se la llevó a la boca, sus dientes chocaron con ella, estaba crujiente, era un producto exitoso que había practicado muchas veces la noche anterior, hacía mucho tiempo que no lo hacía y hacía tiempo que lo había olvidado, pero todavía recordaba que a Nian Weijun le gustaba comerlo.

    "Está claro que fuiste tú quien dijo que el té de frutas estaba bueno con más miel".

    Nadie en la habitación le contestó, incluso el azúcar negro estaba tumbado durmiendo.

    Aquella tarde, la familia Nian anunció la noticia oficial de que para compensar la falta de boda de entonces, y para celebrar en cierto modo el regreso a salvo de Xu Yiran, ambos planearían una nueva boda.

    Cuando la noticia salió a la luz, la larga enemistad entre los dos fue desapareciendo, y las acciones de la familia Nian incluso subieron un poco, y ahora todo el país está pendiente de esta pareja de "compañeros amorosos" que han experimentado la vida y la muerte y siguen trabajando juntos.

    "Hermano..." Xu Yiting miró a Xu Yiran recogiendo sus cosas en su habitación y se sentó en el borde de la cama.

    "No tienes que persuadirme". Se puso en cuclillas en el suelo para hacer las maletas, sin mirar atrás, como si quisiera seguir un camino así.

    Xu Yiting originalmente no tenía intención de persuadirle, los dos padres no lo sabían, y pensaban que estos dos estaban realmente enamorados de nuevo, sólo él conocía los vericuetos, tampoco pudo soportar las súplicas de Xu Yiran antes de acceder a ayudarle.

    "El pequeño Mu ...... te lo pedirá primero".

    No tenía intención de traer al niño, sabía que sin duda no obtendría buenas miradas si se mudaba allí ahora, no quería que el niño le siguiera y sufriera, si Nian Weijun lo mencionaba... dejaría que ambos se encontraran de nuevo.

    No sabía si Nian Weijun había olvidado o no creía que Xu Mu era su hijo, y nunca lo mencionó cuando los dos se encontraron tantas veces, o si... si era su línea de sangre o no, mientras fuera el hijo de su Xu Yiran, no lo miraría más de una vez.

    "Sabes que no puedo cuidar de un niño, y es bueno que a Xiao Mu no le importe. He encontrado una guardería para él, estará matriculado dentro de un mes".

    "Me alivia que hagas tu trabajo".

    Xu Yiting miró la delgada espalda de su hermano, realmente no soportaba verle marchar, qué tenía de bueno ese Nian Weijun... pero le apetecía dejarle ser caprichoso de nuevo, a veces es impotente querer a alguien, igual que él.

    Los dos casi han hecho las maletas, Xu Yiting ayudó a bajar todas las cosas con la intención de enviarlo personalmente, y naturalmente es imposible tener gente allí. Los dos se dirigieron a la entrada de la comunidad, pero vieron una figura conocida, que les saludó con cierta formalidad.

    El coche se detuvo a un lado de la carretera y un Xia Xing quemado por el sol y sudoroso corrió hacia él y llamó a la ventanilla.

    La ventanilla del coche se deslizó hacia abajo y Xia Xing pareció congelarse por un momento al ver a Xu Yiran, que inclinó inequívocamente la cabeza antes de darse cuenta de que su reacción era un poco grosera.

    Se volvió y esbozó una gran sonrisa: "Cuñada, vengo a recogerte".

    Xu Yiran levantó la cabeza para mirarle: "¿Es... él que te dijo que vinieras?".

    Xia Xing originalmente quería decir que no, que vino aquí después de enterarse por sí mismo, pero al ver los ojos de este omega, sólo exprimió un "sí".

    Por supuesto, después de escuchar esto, Xu Yiran estaba visiblemente feliz, y las comisuras de sus labios se levantaron, incapaz de contenerse.

    Por el contrario, Xu Yiting dijo fríamente: "No hace falta, enviaré allí a mi hermano, que no se haga el simpático".

    "De acuerdo, iré contigo, Yiting abre el maletero". Dijo a punto de salir del coche.

    "¡Hermano mayor!" ¡Por qué su hermano es tan inútil!

    Xu Yiting todavía lo siguió al final, y no tenía muchas cosas, solo dos maletas, muchas de las cuales eran la ropa que Xu Yiting le compró durante este período, y algunos libros, y no había nada más.

    La impresión de Xu Yiran sobre Xia Xing seguía siendo muy buena, en aquel momento pensaba que era como Yiting, alegre y sin intrigas, bastante cómodo para llevarse bien con él, también recordaba que parecía tener un hermano mayor.

    Xia Xing parecía haberse quedado pensativo durante mucho tiempo, luego se armó de valor y dijo: "Cuñada, qué bien que sigas viva..."

    "En realidad, me he sentido culpable todos estos años. Si fuera nuestra responsabilidad en ese entonces, no te habrías involucrado... no conocíamos a la gente lo suficiente como para dejarte...."  Afortunadamente, el jefe se olvidó de todo, él fue quien descubrió el "cadáver" primero, durante los siguientes dos años a menudo tuvo pesadillas y la culpa en su corazón se hizo cada vez más grave. Después de ver a un psiquiatra, se recuperó gradualmente.

    Xu Yiran le escuchaba en silencio, su expresión también se ensombreció.

    Al verle así, Xia Xing se puso un poco ansiosa y habló un poco incoherentemente: "Si... me culpas, cualquier compensación que pueda darte, mientras lo digas, sé que sea lo que sea no puede compensarte, pero... yo realmente..."

    "Nian Weijun nunca me preguntó por lo que he pasado..." Estaba claro que incluso Xia Xing se preocuparía y sentiría por él.

    "¿Qué?"

    "Nada, quiero tomarme un descanso", apoyó la cabeza contra la ventana y cerró los ojos.

    Xia Xing también se tranquilizó, todavía no sabía exactamente por lo que había pasado Xu Yiran después de su desaparición y no se atrevía a preguntar, aunque el Jefe parecía estar aburrido de su cuñada, pero poder continuar con este matrimonio era una oportunidad para que pasaran tiempo juntos, quizás algún día el Jefe se acordaría.

    Al principio solía hablarle de Xu Yiran y de cómo estaban enamorados, pero Nian Weijun parecía distraído y ni siquiera creía que la persona dentro de la historia que le estaba contando fuera él mismo. En una etapa posterior, incluso sintió que esa persona ya no estaba allí y que esos acontecimientos pasados eran simplemente una carga en la que pensar y no quería seguir escuchándolos.

    Además la relación de Wei Zhiyan y Nian Weijun... estaba un poco molesto cuando pensó en esto, conocía los pensamientos de Zhiyan sobre el jefe, cuando Xu Yiran no estaba, todavía pensaba que era bueno tener a alguien con el jefe, ahora... es una cuestión de ellos.

    Al regresar a ese "hogar" familiar pero desconocido, rechazó cortésmente la ayuda de Xia Xing, diciendo que quería empacar sus cosas solo, y Xia Xing lo ayudó a llevar su equipaje, solo entonces los dos se dieron cuenta de que la puerta del dormitorio la habitación estaba cerrada.

    Xia Xing estaba un poco avergonzado: "Esto... puede... ser que el jefe tiene miedo de los ladrones.", qué débil era esta excusa.

    "No pasa nada". Dijo mientras se dirigía a la sala de estar, rebuscaba en el armario que había bajo el televisor, sacaba un juego de llaves y procedía a abrir la puerta.

    "...", Xia Xing estaba algo estupefacta.

    Xu Yiran explicó amablemente: "Por aquel entonces, tenía una llave para todas las habitaciones de la casa por si había algún accidente, y no esperaba que no se enterara después de tantos años".

    Por supuesto, el Jefe no era en absoluto una persona que pudiera ocuparse de las tareas domésticas.

    Después de que Xia Xing se marchara, Xu Yiran paseó por la casa, la distribución general seguía siendo la misma, pero muchos detalles eran diferentes, se habían instalado luces en las esquinas, la habitación destinada originalmente a ser utilizada como cuarto de mascotas se convirtió en habitación de invitados, el salón había sido repintado, era su color gris menos favorito, algo muerto...

    Miró en la nevera y efectivamente no había nada, la cocina estaba limpia como nueva, mejor hacerle una buena comida esta noche.

    Se decepcionó un poco al comprobar que, como entonces, había recorrido un largo camino para intentar comprar víveres, sólo para encontrarse con que el pueblo urbano que había allí hacía tiempo que había sido demolido y el mercado era ahora un parque. Estaba un poco decepcionado.

    Todavía no es muy competente, pero afortunadamente la sensación todavía está ahí, finalmente terminó dos platos después de arruinarlos muchas veces, solo para darse cuenta de que ya eran las siete de la noche y Nian Weijun aún no había regresado.

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